viernes, 22 de agosto de 2014

¿Cómo curar el cordón umbilical?

La pregunta de cómo curar el cordón umbilical suele preocupar a muchas madres, sobre todo si son primerizas. Aunque existen muchas opiniones sobre cómo proceder, se debe tener en cuenta que la pérdida del cordón umbilical en todos los mamíferos es un proceso que el cuerpo es capaz de hacer por sí solo.


¿Qué es el cordón umbilical?

El cordón umbilical es la unión entre el embrión y la placenta, y que permite la trasmisión de nutrientes y oxígeno durante el embarazo. Está compuesto por arterias y venas. Una vez que el intercambio entre el embrión y la placenta finaliza y el bebé nace, se corta el cordón umbilical (ya que su utilidad caducó).

El cordón umbilical humano mide aproximadamente unos 56 centímetros de longitud con un diámetro de 1 ó 2 centímetros. Posee dos arterias y una vena. Debido a que su corte deja una cicatriz para toda la vida (el ombligo), muchos padres se preguntan con preocupación cómo curar el cordón umbilical.

Cómo curar el cordón umbilical
El cordón se corta aproximadamente tres minutos después del parto. El resto del cordón cae entre el octavo y quinceavo día de vida del niño. Su curación tarda entre tres y cinco días más. Ante la pregunta que se realizan los padres hay una sencilla respuesta: la mayoría de las veces el cordón se cura solo.

No obstante, existen algunos cuidados básicos a tener en cuenta, ya que el muñón del cordón umbilical es la fuente de infección más usual en los recién nacidos.

El ombligo del bebé se limpiará y desinfectará utilizando una gasa estéril con solución antiséptica. Debe limpiarse la herida y la piel de alrededor con alcohol de 70° o clorohexidina. Es importante resaltar que no puede utilizarse antisépticos con base de yodo, pues el bebé podría absorberlos a través de la piel.

Después de la limpieza se recomienda secar bien la zona, y enrollar otra gasa empapada en alcohol alrededor del cordón. El procedimiento completo de cómo curar el cordón umbilical se debe realizar entre tres y cuatro veces al día, cambiando la gasa frecuentemente.

Otras recomendaciones

Es importante dejar que el cordón umbilical se desprenda por sí solo, y nunca forzarlo (aun cuando esté sostenido de un hilo muy fino y creamos que está a punto de caer).

Por otra parte, una vez que el cordón se haya caído, se debe seguir limpiando la zona hasta que esté completamente seca. Y al colocar el pañal al bebé, se debe asegurar que el cordón y la pinza que lo sostiene queden cubiertas, para evitar que el pequeño pueda engancharse con la ropa.

También es importante destacar que es normal que se produzca un leve sangrado del cordón umbilical del recién nacido, especialmente los primeros días luego de su caída.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda mantener el cordón completamente limpio y seco sin aplicar ningún antiséptico ni antibiótico. Esto se debe a que su uso no está justificado y retrasa la caída del cordón. La antisepsia de la zona puede garantizarse simplemente con una buena higiene.

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